Sueño contigo y tengo esa ansiedad por querer hablarte, ¡aunque sea por whatsapp!
Uno de cada tres pensamientos, por lo menos, termina en: a él/ella le gustaría esto
Pero solo somos amigos, no es el momento, no insistas, no quiero lastimar-te (-me)
Liniers: Es así como hace para ser invencible. Se vuelve un planetita impenetrable. Todo va bien, hasta que en un momento de descuido… la ve.
Una situación cotidiana, conocemos a alguien que, con el tiempo, nos hace sentir comprendidos, nos valora por quienes somos, por lo que somos capaces de hacer e, incluso, por lo que cree que somos capaces de hacer. Y, lejos de sentir rechazo, -¿cómo hacerlo?-, pagamos con la misma moneda. O, tal vez, sin saber, elevamos la apuesta. Se desarrolla la comunicación, convirtiéndose en un acoso permitido, bien recibido; al mismo tiempo que se respetan las libertades: No hay exclusividad, pero que bien se siente que piensen en nosotros por sobre todas las cosas.
Esto se torna personal; como el trago corto, trepa sin avisar. Pasan los días, no necesariamente tienen que ser muchos, y abrimos los ojos: «¿por qué estoy sonriendo?» Las llamadas de madrugada, la noche cómplice y esa luna que sonríe: ¡Maldita sea! ¿Confusión o miedo? No esperábamos que fuera así –expectativas que arruinan todo-. «Sé que me gustas, pero no quiero que vaya así de rápido». Tenemos todos los síntomas y tratamos de controlar la situación, y es que para volver a entregarse o, incluso, para darse al amor por primera vez, muchas veces queremos asegurarnos de manera enfermiza. ¿Por qué no estar enamorado? ¿Fantasmas del pasado? ¿Inseguridad? A veces no merece la pena pensar mucho, sino dejarse llevar por el sentimiento.
Por lo general, le tenemos pánico al amor porque es una palabra que demanda demasiado compromiso; sin embargo, que bonito se siente ser ‘el amor de alguien’. Puede que esa ‘pertenencia’ sea una de las razones por las cuales no nos sintamos preparados para dar ese paso, pero el hecho de enamorarse no le resta a uno libertades. Esto debe aclararse en la negociación –cuando poco a poco nos conocemos y decimos qué nos gusta y qué no sobre la relaciones-. Llevando este caso al recurrente ejemplo del mercado sentimental, uno hace la negociación de los términos de la relación que desea tener, muchas veces de manera tácita pero siempre clara, antes de que surjan los malos entendidos. El amor nunca será una constante, no debería haber exigencias sobre el sentimiento desarrollado, sino la lucha bilateral para que este se mantenga y crezca. Entonces, si parece tan sencillo en la teoría, ¿por qué resulta tan tedioso cuando tenemos en frente a alguien que nos gusta? Hazlo Sencillo:
un-rato-de-poesia.tumblr.com – Si me quieres, dímelo
Si tenemos todos los síntomas de habernos enamorado, ¿por qué no darnos una oportunidad para intentarlo? En publicaciones anteriores he mencionado porqué sobreponernos a los prejuicios, a los miedos y al qué dirán. Lo que vale aquí es que no importe si esta persona que nos hace sentir bien logre ser ‘el amor de nuestras vidas’, sino que estemos dispuestos a ser mejores por y junto con ella. Esta parte del ‘amor’ sí es una decisión.
Conclusión
El mensaje es claro: entre el gusto y el querer, podemos decidir; entre el querer y el amar, no tenemos nada que hacer. Pónganse en el límite correcto y no sentirán remordimientos. Por si acaso, He omitido hablar de factores como el duelo tras haber salido de una relación; o, incluso, estar en una relación que viene a menos y estar desarrollando este nuevo sentimiento. Ambos casos pueden considerarse obstáculos para esta naciente sensación, sin embargo, el hecho de que ya exista ‘un nuevo personaje’ hace que merezca la pena considerar si lo que estamos llevando debe acabarse para emprender una nueva aventura. Así como estos procesos, cada quien podrá poner cualquier justificante para decir: ♫ No estoy enamorado, así que no lo olvides, es sólo una etapa tonta que estoy atravesando.
Nadie Nos Entiende 
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Cuanto más se niega, más enamorado se está.
Es tan simple como la frase que pusiste:
Si me quieres, dímelo.
A veces tenemos la manía de huir de esos sentimientos,
asociandolos a debilidad, construyendo nuestra particular coraza.
Precisamente creo justo lo contrario,
cuando las emociones y sentimientos nos acompañan
somos capaces de logros inimaginables.
Un abrazo, Paolo.
Como de costumbre, totalmente de acuerdo contigo 😉 Y es que no existe peor doble discurso que amar sin correr riesgos. Somos imperfectos, somos volubles; pero somos capaces de construir, si queremos, desde lo más pequeño. Otro abrazo para ti!
qué buen post! lúcido y sin florituas 🙂
(florituras)
¡Gracias Ava! Tu blog es impresionante, no escondes nada. Así intento yo hacer con el mío aunque en otra temática, pero algunas veces me pierdo, jejeje. ¡Un abrazo!
Muchas gracias! Desde un principio tenía claro q quería un blog honesto, donde la gente pudiera verse reflejada de una u otra manera, y eso que me dices me emociona 🙂 Y por cierto, me encantó eso de «El amor nunca será una constante, no debería haber exigencias sobre el sentimiento desarrollado, sino la lucha bilateral para que este se mantenga y crezca». Que acertado!
Un abrazo
no estoy enamorada solo es una etapa tonta que estoy atravesando o eso creo :3
Pues ya te enterarás. O eso espero. Un abrazo y gracias por comentar.
Hola te he premiado con Liebster awards, no sé si al poner tu dirección de la página te llegó. Aquí te dejo los pasos a seguir http://marareyes.wordpress.com/2013/09/28/gracias/
me encanta que seas tan constructivo contigo mismo y con el mundo que te rodea. Nunca dejarás de impresionarme.
Gracias Anónimo 😉 Me quedaré con la interrogante de un poco de ti. Saludos.
Enamorarse es la etapa mas bonita y el inicio de …. «algo» que puede ser noviazgo, aventura, o simplemente estar enamorad@…. Que bonito se siente 😀 . Sin embargo muchos no sabemos vivirla al maximo, le pinemos trabas a
Totalmente cierto… y esas trabas en realidad son impedimentos para nosotros mismos, que nos impiden conocernos y crecer como personas.
Un verdadero placer leerte, un beso enorme
Un honor que te agrade mi blog, el tuyo es espectacular. Un besote.
¡hola! es la primera vez que visito tu blog, sinceramente, me encantó.
llegue acá por leer un poema de Mario Benedetti, y la verdad no me arrepiento. Lo compartiré con mis amigos lectores para que tu blog crezca, se lo merece. ¡Un abrazo desde Argentina! ❤
Hola Valentina, muchas gracias por tu comentario. Espero tenerte pronto y seguido por aca, compartiendo con todos lo que opines y lo que sientes 🙂 Muchas gracias por tu tiempo, un abrazo desde Lima. Pablo.
Muy bueno! 😀 Creo que depende de la elevación del sentir hacia esa persona, vale la pena luchar o lo que se.decida compartir y vivir, como sea hay un buene fundamento para compartir, el.problema es que a veces queremos abarcarlo todo y a veces el esfuerzo y provocar el espacio y tiempo para alcanzar lo que queremos nos pide mucho y a veces no nos exigimos para ello, lo importante en medio de cualquier proceso…es dar y compartir lo mejor que se pueda…